miércoles, 1 de enero de 2014

La fuente de la felicidad



Esta semana hemos estado en la función del Circo Wonderland en Valencia. Hemos asistido con algunos de los muchachos del proyecto de circo social que hemos puesto en marcha en Reus.

¿Qué es el circo social? Es un proyecto educativo y de transformación social a partir de las artes del circo.

A nivel individual, las artes del circo ayudan a potenciar la autoestima, la tolerancia frente a la frustración, la capacidad de levantarse y aprender de los fracasos, y el sentido del humor.

A nivel comunitario promueven la integración, el trabajo en grupo y el apoyo mutuo, el respeto ante las diferencias y la solidaridad.

Todo esto lo estamos experimentando ya en Reus desde principios de octubre pasado.

Al visitar Valencia y el Wonderland, sin embargo, hemos descubierto algo más.

Hemos aprendido que todo este esfuerzo tiene un objetivo que va más allá de nosotros mismos. Se trata de hacer felices a los demás, pero que a la vez eso es lo que nos hace felices a nosotros mismos.

Los chavales alucinaban viendo lo bien que lo pasaba la gente, los aplausos, el entusiasmo. ¡Ellos mismos estaban entusiasmados! Pero también viendo lo bien que lo pasaban los artistas al dar lo mejor de si mismos al público.

En el viaje de regreso a casa, todos iban comentando en el coche, y todos querían ser domadores, payasos, acróbatas...

Recordé que había leído algo de C. S. Lewis sobre este tema y al llegar a casa lo busqué.

El gran Lewis escribió que lo mejor de la felicidad "es que te libera de pensar en la felicidad, como el gran placer que puede darnos el dinero es hacer innecesario tener que pensar en el dinero".

¿Será que hemos encontrado al fin la fuente de la felicidad?